Instalaciones fotovoltaicas aisladas de la red

La utilización de la energía solar fotovoltaica para abastecer de electricidad aquellas localizaciones donde no hay red eléctrica o donde se genera electricidad a través de costosos grupos electrógenos es una de las aplicaciones más antiguas que se conocen; de hecho, los paneles solares fueron inventados para dar servicio a los primeros satélites.

Una instalación fotovoltaica aislada genera electricidad por medio de módulos solares fotovoltaicos. Esta electricidad, se consume de forma inmediata si existe necesidad y, en caso contrario, queda almacenada en baterías para ser recuperada en el momento en que exista demanda o durante la noche cuando cesa la radiación solar. Un adecuado dimensionamiento y ejecución de la instalación, nos permite tener un nivel de confort igual o superior al que nos proporciona la red eléctrica de una forma limpia, segura y totalmente renovable.

En el caso de consumos alimentados con grupos electrógenos, las instalaciones fotovoltaicas aisladas nos permiten sustituir total o parcialmente el consumo de gasóleo así como las tediosas tareas de rellenado del depósito, costos de mantenimiento y ruidos de funcionamiento que llevan aparejados.

Ejemplos de instalaciones aisladas 'llave en mano'

  • Instalaciones de bombeo para riego

  • Alimentación de hoteles o albergues rurales

  • Instalaciones de telecomunicaciones

  • Sistemas de carga de vehículos eléctricos industriales o domésticos

  • Instalaciones agrícolas o ganaderas

¿Cómo funciona una instalación?

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